El martes pasado comunicamos nuestro Plan de negocio 2017. En él se constata
que las pérdidas de 2014 son coyunturales por los ajustes contables asumidos
tras la auditoría de PWC y se aprecia cómo la compañía vuelve a beneficios
ya este mismo año. Es decir, la Compañía vuelve a su senda habitual de
incremento de la producción de piezas, en respuesta a la creciente demanda, y,
por tanto, a los números negros en sus resultados.
Con un criterio de previsión de resultados muy conservador, resultados backlog,
es decir, resultados según contrato firmado a día de hoy, nuestra facturación
será de 161 millones de euros en 2017 y de 150 en 2016, lo que supone unos
incrementos del 166,6 por ciento y del 158,6 por ciento, respectivamente, con
respecto a los 58,6 millones que ingresamos en 2014 (resultado aún sin auditar
que puede oscilar).
Por sectores, la facturación por la fabricación de piezas de la industria
aeroespacial asciende de los 27,1 millones ingresados en 2014 a los 57 de
facturación para 2017, lo que supone un incremento del 110 por ciento. En
cuanto a la fabricación de piezas y tecnología para el sector de automoción,
Carbures incrementa su facturación de los 33,1 millones de 2014 a los 72,1 de
2017, lo que supone un incremento del 117,8 por ciento.
En Carbures seguimos trabajando duro para abastecer la creciente demanda
industrial de diseño, ingeniería y fabricación de piezas y estructuras en
fibra de carbono. Con catorce plantas y oficinas en todo el mundo, tenemos el
posicionamiento geoestratégico para crecer en los sectores clave en los que
operamos: aeroespacial, automoción y obra civil.

Así será el avión de 2040 según Airbus

  La directora de investigación y tecnología en España de la multinacional Airbus, Silvia Lazcano, recibe a INNOVADORES para abordar cuáles serán los principales cambios y tendencias a los que deberá enfrentarse el sector de la aviación comercial en los próximos 50 años.

«Nos encontramos en un periodo en el que podemos esperar innovaciones en todos los ámbitos, desde el propio producto en sí, el avión, hasta en el cómo se producen las aeronaves», arranca Lazcano. Una serie de cambios que pasan desde modificaciones de diseño de pequeño calado y prácticamente imperceptibles para los pasajeros en el corto plazo, hasta el replanteamiento de la estructura del propio avión en el largo.

«Dependiendo de la fecha a la que queramos mirar podemos hablar de distintos cambios. Por ejemplo, en un plazo de treinta años, podemos hablar de arquitecturas distintas a las que estamos acostumbrados a ver, es decir formas distintas del avión a las actuales o motores con diferentes tecnologías y funcionamientos», apunta Lazcano.

Una realidad que, a medida que nos aproximamos al presente, arroja unas modificaciones mucho más sutiles. «A corto plazo, encontraremos cambios en las cabinas de los aviones, una tendencia al empleo de materiales más naturales. Además también tomaremos a la naturaleza como referencia e inspiración para, por ejemplo, copiar la piel de un delfín para reducir los rozamientos. Lo que sucede, es que en su mayoría se trata de cambios que no son perceptibles al ojo humano», comenta Lazcano.

«De todas maneras», prosigue, «también se trabaja en ámbitos más evidentes como el empleo de pinturas por inyección de tinta que permiten hacer logotipos y diseños muchos más complicados,como si de una fotografía se tratase, al mismo tiempo que se reduce el vertido de productos volátiles en la atmósfera».

Otro de los campos en los que se hace más hincapié en el sector de la investigación y el desarrollo de la aviación son los motores. «En este campo centramos nuestros hilos conductores de la investigación en medio ambiente, eficiencia y seguridad y costes», señala Lazcano.

«Dentro de este ámbito, un campo en el que se puede ver como la investigación mediambiental y de costes avanza de la mano es el ahorro de combustibles», añade.

«En el momento que ahorras combustible», prosigue, «consigues índices de mejora en el 60% del coste operativo de una compañía aérea permitiendo ahorros importantes y un comportamiento más ecológico y respetuoso con el medio ambiente».

Una dinámica que, por otra parte, ha acabado con la visión y la tendencia iniciada en los años 80 buscando desarrollar aviones con mucha mayor potencia y mucho más rápidos con el Concorde como principal referente. «Por el momento no estamos trabajando por esa vía», reconoce Lazcano. «No corresponde a nuestra estrategia actual que, según demanda el mercado, se centra en desarrollos incrementales o proyectos muy disruptivos con una visión puesta dentro de 30 años», índice.

En cambio, las principales líneas de trabajo e investigación se centran en parte en los propios procedimientos para desarrollar los aviones de pasajeros que encontraremos en los aeropuertos en un futuro. «En el presente, nos centramos mucho en mejorar la metodología y las herramientas de simulación y cálculo para intentar conseguirdinámicas que permitan un diseño multifuncional de un avión de manera integral y de forma más rápida teniendo en cuenta todos los factores», explica Lazcano. «Se trata de ser capaces de adaptarse mejor a las demandas y acortar los ciclos de desarrollo de los productos, al mismo tiempo que exploramos nuevos materiales, nuevas arquitecturas», matiza.

Una apuesta que pretende dotar a los materiales de los que se construyen las aeronaves con propiedades de las que hasta ahora carecían. «Una línea que resulta interesante es el de los materiales que sean capaces de autorrepararse», explica Lazcano. Uno de los campos en los que, según señala, «ya se dispone de una tecnología madura para incorporar».

Nace en Sevilla la primera incubadora aeronáutica de España

Con una inversión de 1,8 millones, estará en Aerópolis y prevé albergar al menos una veintena de proyectos empresariales a partir de junio

  Es uno de los proyectos más importantes que la Cámara de Comercio pondrá en marcha en 2015: la primera incubadora de transferencia de tecnología aeronáutica y aeroespacial de Sevilla y de España. Así se ha presentado en la sede cameral, donde sus promotores defendieron que esta incubadora “ya está en marcha, es necesaria y es posible”. En concreto, se ubicará en una nave de 1.540 metros cuadrados en Aerópolis que ya ha sido comprada para el proyecto. Su inauguración oficial será en junio y, según las previsiones de la Cámara, podría albergar a, al menos, 20 proyectos empresariales que podrán estar en esa sede un máximo de dos años, prorrogables a tres en condiciones excepcionales.

  Su presupuesto es de 1,8 millones de euros, de los que un 80% son fondos Feder logrados a través de la Fundación Incyde de las cámaras de comercio.

  Así lo explicó Antonio del Cura, asesor en material aeronáutica de la Cámara de Comercio de Sevilla, quien recalcó que es el primer vivero que nace en el país especializado en este sector. Hay otros dos proyectos (en Barcelona y Vigo), pero aún no han arrancado.

  El acuerdo de colaboración lo han firmado el director de Ingeniería de la Unidad de Negocio de Aviones Militares de Airbus, Miguel Ángel Morell, el director de la factoría de Airbus Tablada, Jesús García Arguelles; el vicerrector de transferencia tecnológica de la Universidad de Sevilla, Ramón González Carvajal; el consejero delegado del parque tecnológico y aeronáutico de Andalucía (Aerópolis), Joaquín Grau, también en calidad de director gerente de FADA-CATEC; el director de la Fundación Hélice, Arturo de Vicente, Javier Collado, director de la Fundación Incyde; el presidente de la Cámara de Comercio, Francisco Herrero, y el subdirector general y director territorial de Andalucía Occidental del Banco Popular, Luis Marín.

Carbures abre un taller de reparación de piezas de fibra de carbono en su planta de El Puerto 

La nueva línea de negocio responde a la demanda del mercado y a la inexistente oferta del servicio

R. D. JEREZ | ACTUALIZADO 05.02.2015 - 05:01

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Carbures fabrica y repara. El fabricante de piezas de fibra de carbono anunció ayer la puesta en marcha en su planta de El Puerto de una nueva línea de negocio para el sector aeroespacial, la reparación de piezas y estructuras de composites, con la que "cierra el círculo" del proceso industrial de la fibra de carbono. 

La compañía, que cumple ahora un mes de la reanudación de su cotización en Bolsa, explica en un comunicado que el lanzamiento de la nueva actividad responde a la demanda del mercado y a la inexistente oferta de este tipo de servicio. 

En la misma nota, Carbures detalla que ya venía prestando este servicio para algunos de sus clientes, por lo asegura que la empresa "dispone, y tiene operativa, la tecnología necesaria para la reparación de piezas de fibra de carbono, un proceso minucioso que se hace prácticamente de forma artesanal por auténticos expertos en el manejo de la fibra de carbono y que, una vez se ha reparado la pieza, se somete a un proceso de endurecimiento con la aplicación de una tecnología denominada Sicoteva, una especie de manta eléctrica que calienta y endurece la parte corregida". 

El taller de reparaciones, habilitado en el centro de I+D+i de Carbures en el polígono Tecnobahía de El Puerto, está en pleno proceso de certificación, requisito necesario para la realización de estos trabajos auxiliares, que según explica la compañía, contemplan desde reparaciones estéticas hasta procesos de reparación estructurales con curado en autoclave (un gran horno en el que se meten las piezas de fibra en sus moldes para endurecerlas). 

Según el presidente de Carbures, Rafael Contreras, "al cerrar el círculo del proceso industrial de la fibra de carbono con el nuevo servicio de reparación que ofrecemos cumplimos con nuestra estrategia de seguir creciendo de forma orgánica y seguir generando sinergias entre las distintas compañías del grupo. Es un paso adelante, un paso más, en nuestro hoja de ruta de crecimiento como compañía, y que nos consolida como Tier 2 de referencia en el mercado". 

La compañía indica en su nota informativa que Carbures se posiciona así en España como el primer proveedor de nivel 2 que ofrece un servicio integral tanto a los grandes fabricantes de aviones como a los proveedores de nivel 1. 

Sobre la nueva acgtividad, la empresa explica que hay dos tipos de reparaciones de piezas de fibra de carbono: las cosméticas y las estructurales. Las primeras se centran en la corrección de desperfectos, como puede ser una marca, raya o similar, en piezas que es válida por tamaño, encaje y forma. Las segundas, son las reparaciones dirigidas a pulir la pieza que no ha salido perfecta en el proceso de fabricación y que, por ejemplo, tiene un pequeño abultamiento.

La indsutria aeronáutica andaluza facturó más de 2.000 millones y creó 400 empleos

  La facturación de la industria aeronáutica andaluza superó por primera vez en 2013 la barrera de los 2.000 millones de euros y generó más de 400 empleos nuevos, hasta llegar a un total en el sector de 11.685 trabajadores, un 3,5% más que en 2012, según el último Informe del Sector Aeroespacial en Andalucía que cada año elabora Hélice.
En este crecimiento tuvieron un gran protagonismo las ventas internacionales, que alcanzaron los 1.509 millones de euros en 2013, un 44% más que en 2012. También en 2013, el sector aeronáutico de Andalucía incrementó en dos puntos su aportación al PIB industrial manufacturero andaluz, que pasó del 17% al 19%. Respecto al sector auxiliar, en 2013 aumentó la productividad en un 7% con respecto a 2012, año en que había crecido a su vez un 10% con respecto a 2011.

  El sector aeroespacial andaluz, del que forman parte 115 empresas localizadas fundamentalmente en las provincias de Sevilla y Cádiz, “ha experimentado un gran crecimiento en los últimos años, no sólo en volumen de negocio y empleo, sino también en productividad, capacidad financiera, especialización, internacionalización, inversión en I+D, diversificación de la cartera de clientes y exportaciones”, sostiene el nuevo presidente de Hélice, Joaquín Rodríguez Grau.
“Hay un gran camino avanzado, gracias al trabajo conjunto que se ha realizado entre empresas y Junta de Andalucía, para quien el sector aeroespacial andaluz es estratégico, pero tenemos que exigirnos más y mirar el futuro con ambición. Tenemos que seguir aumentando la especialización en las actividades y subsectores de mayor valor añadido, mejorar los niveles de productividad e innovación, lograr una mayor dimensión operativa, económica y tecnológica, mejorar la estructuración de la cadena de suministro, continuar diversificando clientes y mercados y ampliar la actividad hacia nuevos nichos de negocio”, agrega Rodríguez Grau, que asume esta tarea desde la presidencia de Hélice “con ilusión y compromiso”.